Un calcetín infinito

“¡POR ESO EL CALCETÍN ES INFINITO! Pues tiene dos comienzos muy bonitos, pero ningún final”.

Cuento infantil maravillosamente ilustrado donde seguiremos a Soledad, una anciana de la que parece haberse olvidado todo el mundo, incluido Papá Noel que ni un regalo le ha dejado en el calcetín. ¿Será que el calcetín era muy pequeño?

Esta pregunta nos llevará a seguir el camino de un calcetín infinito tejido por Soledad, buscando la otra punta, el otro extremo y que no sabemos a qué lugares nos llevará. ¿Te animas a buscar la punta perdida?

La verdad que es un libro muy bonito, con unos mensajes sobre la soledad, sobre lo material y sobre la magia de la navidad. Pero más allá de lo bonito del libro, más bonito ha sido con quien y cómo lo hemos leído. Ha sido un gustazo compartir este cuento con gente tan especial. Y eso hará que este libro sea uno de esos libros inolvidables.

Porque este fin de semana hemos sido 18 inicios y ningún final. Porque sabemos lo que es compartir y nos da igual lo material (pero que no falte pan ni jamón, eso sí). Porque lo que unieron los libros que no lo separe nadie. Seguimos el hilo de los libros y encontramos muchas puntas más.

¿Libros infantiles que os hayan marcado o gustado? ¿Libros que sean especiales por la compañía, por el con quién, por el cuando o por el dónde? ¿Algo interesante que te haya pasado últimamente?

🧦Como cada 25 de diciembre, aquella mañana Soledad buscó en su calcetín para ver qué regalo le había dejado Papá Noel.

Pero NADA. Allí no había nada.

🎁Y Soledad pensó en una posible explicación: quizás su calcetín era demasiado pequeño para que cupiese un regalo.

Así que se puso a tejer y tejer, y allá por nochevieja tanto tejió Soledad que la anciana no encontraba el final del calcetín. ¿Dónde estará?

Lo buscó en enero. Y en febrero. En agosto. En octubre. Y mientras lo buscaba, Soledad pensaba cuántas cosas maravillosas cabrían en su enorme calcetín: un caballo, un imperio, cien lámparas, un piano, un futbolín...

🤔 Pero ¿y si llegaba Navidad y no encontraba la punta?

🎄Y Nochebuena llegó. Y Soledad la encontró.

✨¿Dónde estaba? ¿Qué le traería Papá Noel ese año?

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Una historia poética genialmente escrita (como siempre hace Pedro) en una rima impecable y con tintes dulces y divertidos.

Con una amplia secuencia temporal, 365 días separan el principio y el final de este #albumilustrado con una hábil (y sola) tejedora como protagonista.

Misterio, repeticiones y exageraciones añaden más énfasis a la trama y se complementan con unas ilustraciones que nos van trasladando a las distintas épocas del año como un paseo nostálgico por la ciudad, el campo y hasta el mar.

Un recordatorio de cuáles son los mejores regalos (no precisamente los materiales) en Navidad y en cualquier época del año con un final de lo más cálido.

¡Qué historia más bonita y emotiva!
Tras un tono jocoso, se esconde una realidad muy triste y es que las personas mayores cada vez están más solos y necesitan a alguien con el que poder hablar. Hace unos días leía en el periódico 'La Vanguardia' este titular: «La mitad de ancianos con teleasistencia llaman para hablar “un ratito”».

Soledad, el nombre de esta señora aunque también podría ser un sentimiento, quiere tener algún regalo para Navidad. Como su calcetín navideño es pequeño decide tejer uno, el problema es que se le va de las manos, se le va tanto que se pasa un año entero siguiendo el rastro de su calcetín para llegar a la punta. Mientras le acompañamos en su búsqueda, nos irá dando ideas de regalos y cuántos caben en su eterno calcetín (bolsos, monasterio, una ciudad, un planeta...). Cuando pierde toda esperanza, al fin cree hallar el final del trayecto aunque no del todo.

Encuentra algo mucho mejor: el mejor regalo del mundo, no era nada material y nunca había caído en ello (¿qué será?). Así es como pasa su mejor navidad.

Soledad de nombre y de situación vital es una mujer de edad media que lo único que (cree que) desea es un regalo por Navidad. ¿Pero cómo recibir un regalo de Papa Noel si su calcetín es tan pequeño? O al menos eso es lo que piensa cuando, la mañana del 25 de diciembre lo encuentra vacío. Con tal de facilitarle el trabajo al invitado de rojo, decide tejer uno nuevo, más grande. En su soledad, la señora destejía el tiempo y los días pasaban. Dedicó a las labores los diez kilos de lana que tenía en casa y el tiempo que restaba hasta Nochevieja. El resultado: un calcetín un pelín largo cuyo final es incapaz de ver a la luz de los petardos.

Soledad pasará el nuevo año recorriendo la ciudad y las calles persiguiendo el calcetín viajero y pensando en todos los regalos que le iban a caber dentro. La historia de Soledad, tan bellamente ilustrada, es una delicia para pequeñxs y mayores. Un recorrido por las diferentes festividades que se suceden a lo largo del año. Asimismo, una educación en valores, pues muestra que el regalo más preciado es la compañía y el tiempo, el tiempo que lxs demás pasan con nosotrxs. Una historia tierna y emotiva, una lectura perfecta para estas fechas.

Un cuento infantil para leer y releer -como el calcetín- hasta el infinito.
Pedro Mañas vuelve a dar noticia de sus extraordinarias dotes imaginativas, con una historia rimada, en la que se combina el humor y la emoción, en total equilibrio, y capturando por igual a niños pequeños y mayores.
Este álbum ilustrado funciona tanto con prelectores, que se entusiasmarán con las divertidas y detalladas ilustraciones, y con las rimas y fórmulas repetidas, como aquellos que ya saben leer y pueden permitirse dedicar un tiempo más pausado a entonar su lectura oral sin perder un ápice de diversión.
Mientras tanto, los mediadores y los adultos tendremos en las manos una historia amable, en la que intervienen numerosos centros de interés acordes con la Educación infantil, y no exenta de valores incorporados sin excesos y con total naturalidad.