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Me gustan los libros anteriores de esta serie, pero este me ha costado leerlo porque no he llegado a concectar con Destiny hasta después de la mitad del libro. Por mucho que su infancia le haya marcado, no se puede planificar todo de una forma tan aseptica y tan cerrada. Por otro lado Kipling siempre tiene buena intención a la hora de solucionar problemas, pero el suyo es que núnca consulta antes de hacerlo creyendo que hace lo correcto. La parte final del libro me ha parecido mucho más amena. El hecho de que yo no conecte con un personaje, no desmerece la calidad del libro. |
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