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Si el primero me encantó, este es una auténtica fantasía, pasa todo lo que esperamos que pase en un buen libro de fantasía, pero también pasa todo lo que no esperamos que pase (para bien y para mal). Feyre, ahora conocida como Feyre Rompemaldiciones está con Tamlin en la Corte Primavera, con el recuerdo de Amarantha todavía latente dentro de ella, y con un tatuaje en el brazo que no la deja ser libre. Tamlin, el alto lord de dicha corte, solo piensa en proteger a Feyre sin darse cuenta de que a su vez, eso la está destruyendo. Rhysand, el alto lord de la Corte de Noche, sentirá una llamada de socorro en lo más profundo de su interior y a partir de este momento, el libro nos enganchará. Feyre aprenderá que no todo es lo que parece, y que tras haber "nacido" de nuevo su cuerpo ya no es el mismo y tiene unas cualidades maravillosas. Poco a poco irá recomponiendose y poniéndose en el lugar que siempre ha merecido. Conoceremos a personajes increíbles como Azriel, Cassian, Mor, Amren... Atención spoilers: El slow burn entre Feyre y Rhys, nos traerá de cabeza, pero cada gesto y cada segundo que pasan juntos, merece la pena. Las escenas del tallador de huesos y la tejedora me han parecido una auténtica pasada, con la tensión ideal. Y los últimos capítulos del libro, me han parecido de otro nivel, la tensión con el rey de Hybern, cuando cortan (supuestamente) el lazo entre Feysand... BRUTAL Creo sin duda que este libro es mejor que el anterior. |
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