AVELUT nº 2)

Volvemos con las aventuras macabras de Tom Harris, nuestro investigador sumido en las tinieblas. A pesar de que el primero ya me pareció una obra maestra, este me ha parecido más profundo y bastante más duro por los temas tan duros y crudos que toca.

Adoro la cantidad de información que Ana nos ha brindado, porque ella es una especialista en la oscuridad que habita en las mentes humanas. Es una psicóloga bien dotada y no teme mostrarnos esas partes que solo los demonios más oscuros pueden reflejar. Eso le ha dado una parte de lo más realista y creo que por eso se me pusieron los pelos de punta en varias ocasiones.

No puedo compararlo con el primer libro, SHJOL, porque ya hace bastante tiempo que lo leí, pero este me ha parecido mucho más completo, profundo y perturbador, a la vez que adictivo. Sobre todo con ese apoteósico final, que me dejó con toda la boca abierta. Estoy escribiendo la reseña un par de días después y todavía se me pone la piel de gallina cuando me acuerdo.

En mi opinión, Ana se ha superado con esta entrega. No sé si habrá una tercera parte, pero si la hay, seguro que vuelve a sorprenderme una vez más. Y no solo juega con el factor sorpresa en todo momento, si no que los personajes también han avanzado con sus vidas, para bien o para mal, todos han cambiado. Me gusta mucho ver que los personajes también crecen junto a la trama.

También he notado que la escritura de Ana ha mejorado con el tiempo. Se ha vuelto más profesional, con un trabajo arduo de documentación y con una búsqueda interna de los personajes. ¿Hasta dónde podría llegar una madre por el amor de su bebé? ¿Y un padre? Esto os lo dejo para que lo descubráis vosotros, porque me apuesto lo que sea a que no os vais a esperar ese final.

Admiro mucho la capacidad de la autora para jugar con los lectores de esta forma, porque cuando ya piensas que tienes la novela agarrada por las riendas, te das cuenta de que no podrías estar más equivocado. Sabes que estás leyendo algo de ficción, pero...¿y si no? Por muy oscuro que parezca, esto puede pasar en la vida real y es lo que más miedo da. Que el monstruo siempre está dentro de nosotros y puede salir en cualquier momento.