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Al indagar en esta lectura debo confesarles que me amplio el panorama sobre algunos puntos que posiblemente en la carrera me quedaron un poco flojos y me permitió entender un poco más el complejo de Edipo, por lo que no dudo en decirles que si son estudiantes de psicología o colegas le den una revisada ya que muchas veces por pena no nos atrevemos a preguntar y nos quedamos con algunas dudas que se podrían ver despejadas con la ayuda de "Edipo y Violencia". Estoy completamente segura de ello, pues el lenguaje que maneja es bastante digerible, posiblemente para alguien que no conozca nada del tema no le parezca de fácil comprensión pero para un estudiante, colega o maestro seguramente le sera útil. El libro maneja una frase que me ha llamado bastante la atención: "dime cómo interpretas el Edipo y te diré que psicoanalista eres" , pero el motivo principal no es juzgar el tipo de psicoanalista que eres, o si eres o no psicoanalista, esta encaminado a abordar el tipo de interpretación que tienes hacia el complejo de Edipo, te explica que no solo se trata de el rechazo que el hijo siente por el padre y la atracción que siente por la madre, profundiza hasta un nivel más primitivo en el que pone como ejemplo que algunas hembras después del apareamiento matan al macho y el hecho de que tener un hijo no alcanza para estar en posición de madre pues a un hijo no "se tiene" sino que "se le recibe", por lo que desde ese punto nos percatamos que nuestra ideología esta encaminada al sentido de que los seres humanos nos pertenecen, de igual manera que lo siente el hijo con la madre. Como Lutereau nos lo dice "El edipo no es una especulación, sino una estructura que permite esclarecer lo cotidiano", comprender porque el infante siente celos y en que experiencia concreta se comienza a verificar dicha estructura edipica. El autor hace bastantes referencias que también nos pueden ser útiles si queremos indagar más en el tema, por ejemplo a Lacan, inclusive nos habla del feminismo y el hecho de que se deberían de prohibir los piropos, en este punto me hace cuestionarme si los piropos que se deben de prohibir son los ofensivos o todos, pues nadie tiene derecho a incomodarnos y más si se trata de un completo desconocido porque como bien nos dice el texto "Hay una distancia grande entre una grosería callejera y un piropo como modo de seducción". Espero que esta reseña te sea de utilidad y sirva en algún momento dado que necesites leer algo relacionado al complejo de Edipo y como lo maneja el psicoanálisis según Lutereau. Enlace: https://mitijuanalectora.blo.. |
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