Apocalipsis Z

Un abogado de treinta años, del que desconocemos el nombre, vuelca sus pensamientos en un blog. Es una forma de terapia para superar la muerte de su esposa. El treinta de diciembre comienza a informar de los extraños sucesos que van aconteciendo, y termina escribiendo una suerte de diario apocalíptico. Cuando ya no es posible utilizar el ordenador continúa con el diario en una libreta.

Me ha gustado mucho el libro aunque reconozco que iba con miedo. Tras comprar la trilogía me dijeron que no era buena, pero yo he disfrutado un montón con la primera entrega. Abarca aproximadamente nueve intensos meses, y nos deja enfocados para la continuación.

La narración es en primera persona y en forma de diario, lo que me parece muy original. Solo hay un punto de vista, pero no se hace aburrida la lectura, tiene mucha acción y los pensamientos del abogado son interesantes.

También me ha gustado que el protagonista sea una persona normal, no un militar experimentado o un fanático de la supervivencia. Es espabilado, eso sí, y su casa le proporciona un buen refugio al inicio del caos. También contará con ayuda, aunque primero tendrá que enfrentarse, él solo, a multitud de peligros.

La historia va poco a poco y nos enteramos de lo que ocurre a la vez que el protagonista, y pobre anda algo perdido. A pesar de no ser un experto, está algo más preparado que la media para el Apocalipsis. Aún así estará a punto de no contarlo varias veces.

Estoy algo desganada para la lectura últimamente, y tampoco ando sobrada de tiempo, pero no he visto el libro delante de lo enganchada que estaba. Es adictivo y muy fácil de leer. Pronto me pondré con el siguiente porque necesito saber lo que les espera a los personajes.