No me toques ni un pelo... ¡o te vas a enamorar!

Es una historia amena y muy divertida que te saca una sonrisa tras otra mientas lees la historia.

Con los personajes principales te encariñas desde el principio: Ana, chica fuerte y decidida pero que arrastra un fracaso amoroso que le condiciona su día a día ya que, a causa de él, tiene graves problemas económicos. Admiras su fortaleza y su temperamento pero, en el fondo, es un pedazo de pan.
Santi es un hombre más comedido, introvertido, nada espontáneo y estirado que también arrastra otro fracaso que se le suma a su nueva situación laboral tras la muerte de su padre. Santi es alguien muy inseguro y debido a eso se desarrolla gran parte de la historia.

Los personajes secundarios también son muy importantes en la historia: Tenemos a Doña Trini, la madre de Santi y a Sebas, el amigo y compañero de trabajo de Ana. Ambos son pilares en las vidas de Ana y Santi e influyen muy positivamente en sus vidas.
Y, como no, la ex mujer de Santi y antagonista de esta historia que nos desbarata toda la trama.

La novela tiene unos 70 capítulos que son cortitos y hace que la leas en un santiamén. Ambos personajes narran la historia pero la autora hace algo que sorprende y es que las conciencias de ambos nos ayudan a entender la lucha interna que tiene cada uno. Ésta es una de las cosas más divertidas y originales que encuentro en la novela.

Aparte de la trama romántica central, la autora nos muestra varias pinceladas de problemas sociales como la adopción o el cuidado de los mayores que nos hacen pararnos a reflexionar sobre estas problemáticas.