Es una historia bastante corta, juvenil, con toque de magia (también me habría valido para otra de las premisas). También me ha parecido muy tierna, me han gustado mucho los personajes, lo naturales que son. La joven Snapdragon es una protagonista entrañable, con mucho carácter y ha sido un placer descubrirla a través de su relación con sus amigos y familia. Los dibujos también merecen la pena, están llenos de luz y alegría. Creo que es una lectura ideal para calentarse en un día lluvioso de otoño… |