Las huellas imborrables

Seguimos con la saga de Fjälbacka. El quinto libro, Las huellas imborrables.
Aquí Erika después de un año haciéndose cargo de su hija, empieza a trabajar en su nuevo libro y es Patrik quien al cogerse la baja por paternidad se hace cargo de Maja. Lo que hace que Erika tenga un papel muy importante en esta historia.

Erika encuentra entre las pertenencias de su madre unos diarios personales y una medalla Nazi lo que hace que vaya a consultar a Erik Frankel un historiador especializado en la Segunda Guerra Mundial para ver si puede averiguar alguna cosa para poder conocer un poco más a su madre, ya que siempre ha sido muy distante y fría tanto con ella como con su hermana Anna.
Al poco de hablar con Erik, aparece asesinado en su propia casa, lo que hace que Erika se preocupe y desee saber más por el pasado de su madre.
Mientras tanto Martin es quien coge el mando en la comisaría y se hace cargo de la investigación, pero Patrik aún estando de baja de paternidad intenta ayudar en la que pueda, llevándose incluso a Maja con él.

En cuanto a la trama, me encanta cómo se van desarrollando los acontecimientos. Me encanta el misterio y el suspense que lo pone hasta el final. En este libro en concreto creo que ha desarrollado bastante y en algún momento de me ha hecho bastante largo, pero siempre con la intriga de querer leer más.
En esta serie de libros siempre alterna el presente con historias del pasado y en este libro le da un peso muy importante en los acontecimientos ocurridos en el pasado.

Me fallan un poco las relaciones por un lado de Anna y Dan, lo he visto todo muy precipitado, pero en cambio si que los problemas que surgen cuando se van a vivir juntos con la hija mayor de Dan, me parece acertado el desarrollo.
Y por otro lado, la relación de Patrik y Erika me fallan, no me la acabo de creer en este libro. Me ha faltado más descusión entre ellos, lo he visto todo muy de color de rosa teniendo en cuenta que Dan es ex pareja de Erika y luego Patrik va quedando con su ex mujer. No digo que tengan que ser unos celos enfermizos pero un poco de enfado no estaría mal.
El que me ha sorprendido en esta historia es Mellberg que lo hace más "humano" pero siempre con su toque de hombre carca.

Me quedo con ganas de más, de seguir con esta serie que me tiene intrigada hasta el final.