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No sé ni por dónde empezar... Cuando recibí este libro y vi las páginas que tenía, casi me da un patatús, a día de hoy puedo decir, que no me hubiese importado que tuviera el doble de ellas. Me he enamorado de la pluma de Laura, de la historia que nos cuenta, de sus personajes, del entorno, de los inicios de capítulo, de sus toques de humor, de TODO. El don de la salamandra nos cuenta la historia de Emma una chica aparentemente normal, que trabaja en una tienda de ropa y en un bar y pronto descubrirá cosas de ella, que ni ella misma sabe. Y tiene un novio gilipollas, no nos olvidemos de eso. Todo empieza con unos desmayos y a partir de ahí, comienza todo. Los distintos personajes Emma, Nora, Sky, Cosimo, Cota, Div, Ryu, Cael, Guillem, Lucinda, Marco... Nos van a hacer dudar, ¿Quienes son los buenos y quiénes los malos? NO nos vamos a sumergir en un mundo de fantasía, la fantasía llega a las calles de Barcelona, para trasladarse a Roma, donde por fin conoceremos a uno de los vampiros más poderosos. Veremos flashbacks del pasado donde la autora nos introduce en el mundo sumerio de los Utukku. La autora ha sabido combinar muy bien el pasado con el presente y si bien es verdad que los nombres de los Utukku son muchos, realmente cuando vas leyendo te quedas con los importantes. Son los más repetidos. Cuando acabé el libro le envié un WhatsApp a @mirincondelectura_ (lo leímos en LC) diciéndole que sabía que nos iba a dejar en lo mejor del libro y diciéndole ayyy Ayyyy María que me muero! Pasa una cosa al final del libro queeeee... Recomiendo este libro al dos mil por cien, a mi me ha flipado y compartirlo con María ha sido un plus. Creo que va a la lista de favoritos del 2020. Deseando leer la segunda parte. |
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