La veterinaria

Que gratificante es poder formarte y trabajar en una profesión que te apasione, ejercerla con vocación y que se reconozca el mérito. Bajo ese concepto se enmarca esta historia que comienza en Bélgica en el año 1906 y acaba en la Alemania de 1929

Nellie, una joven amante de los animales convierte su pasión en su meta, estudiar y hacerse veterinaria cueste lo que cueste, en un país en el que las mujeres no iban a la universidad a estudiar lo que querían y mucho menos podían ejercer semejante profesión. No así su amigo y vecino Phipps quién heredará la clínica veterinaria de su padre, aunque éste prefiere dedicarse a la música. Entre los dos forjarán un vínculo que les permitirá cumplir sus sueños, pero la vida les sorprenderá con situaciones inesperadas. La Primera Guerra Mundial está a punto de estallar y los llevará por caminos distintos, mientras seguirán manteniendo la pasión e ilusión por lo que creen

Una historia preciosa, de lucha, amistad y amor, de pasión por los animales, especialmente los caballos que en época de guerra fueron tan demandados. Ha sido un paseo no solo en el tiempo sino por varios países de Europa, con unas descripciones y unos escenarios fantásticos como solo la autora es capaz de plasmar

Una novela que si bien es extensa, fluye y engancha desde el principio, no se estanca y sus protagonistas viven un montón de situaciones que logran mantener al lector pendiente de ellos en todo momento. 

No os quedéis solo con lo que cuenta la sinopsis, es muy escueta para lo que abarca y puede llegar a transmitir