Risanto, así es como puedo definir la novela. Para mí, este libro es ella en su máximo esplendor. A través de la cuenta de los atardeceres, van pasando los días, meses, donde sus amigas Laux, Sara y Lucía les acompañan en sus aventuras. Toca temas de los que son necesarios hablar en la sociedad, sin tapujos, dándole la importancia que se merecen. La vecina hace que ese ratito de de lectura se convierta en un unión entre mis manos, corazón, cerebro. Todos laten a la par esperando una nueva sorpresa, una lágrima o una risa. Y en muchas ocasiones, todo a la vez. |