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Una historia más de Jennifer L. Armentrout con unos personajes fáciles de creer, con vidas que están lejos de ser ideales, con imperfecciones y miedos perfectamente tratados y que trata temas complicados. En la que hay una historia de amor que no es el eje principal porque en este libro hay tanto de superación personal y de enfrentar miedos, que sería un error no hablar de ello. Mallory querría gritar, ser capaz de alzar la voz, pero no le quedó más remedio que resguardarse en el silencio. Su infancia no fue fácil, pero la vida le ha dado una nueva oportunidad y vemos su evolución como si de una crisálida se tratase. Rider no ha tenido la misma suerte. Un chico que no ha dejado de intentar salvar a las personas que le importan aunque su imagen pueda hacerle parecer lo que no es. Ella, una chica más fuerte de lo que cree. Él, un chico mucho mejor de lo que piensa. Durante los años más duros de sus vidas lo fueron todo, pero las circunstancias les separaron sin que supiesen nada el uno del otro hasta que vuelven a juntarse por casualidad. Es a partir del momento en que vuelven a verse cuando podemos disfrutar de uno de los amores juveniles más reales y bonitos que he encontrado en una novela de este género. Enlace: https://www.instagram.com/p/.. |
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