Tumba de Dioses

Volvemos al mundo de Tumba Dioses y volvemos a las andanzas de la asesina Mia Corvere. En este segundo tomo de esta trilogía de fantasía, nos adentramos en la siguiente fase del plan de venganza de la joven Corvere o como nos dice Don Majo, en la narración de la vida de Mia. Después de conseguir su puesto en la Iglesia Roja y viendo su imposibilidad de acercarse a Duomo y Scaeva, decide arriesgarlo todo a una carta: el Venatus Magni. La gran competición de gladiadores.
Y sí, ¿qué narices está haciendo? Esto mismo se plantea en la novela, así que en un principio encontraremos una narración a dos tiempos: el primero, lo que sucede en el presente, Mia se ha autovendido para ser gladiadora; el segundo, la explicación de este plan tan descabellado.
Continuidad
Lo cierto es que cuando empiezas con una acción tan radical por parte de Mia te da por pensar que hay algo que no cuadra, que te has saltado algo en la historia. Sin embargo, como hemos dicho, el propio narrador (¿Don Majo?) se encarga de explicarnos qué ha sucedido. En mi caso, al principio me chocó un poco el cambio. Aunque me estaba gustando lo que estaba leyendo, es verdad que nos alejaba mucho del mundo casi oriental en el que nos habíamos metido en el primero y del mundo urbano (dentro de la idea del libro, claro) que teníamos en las explicaciones.
¿Qué es lo que pasaba entonces? Sin querer explicar mucho para no destripar nada, lo que sucedía es que estábamos evolucionando en el mundo e introduciéndonos, ahora ya sí, en las tripas del mundo de Tumba de Dioses. de este modo, la novela se desvía un poco del matiz de aventuras que tenía en la primera parte de la obra, para ser una novela de principalmente sangre y violencia y, en un aspecto secundario pero muy importante, de política soterrada. Así, el espectáculo está servido.
Recreación
El espectáculo está servido, sí, porque el autor ha utilizado como base los espectáculos de gladiadores romanos, junto con sus intrigas políticas en los palcos, fusionados con las particularidades propias de este mundo: razas diferentes, criaturas, pruebas. Una fusión que concreta no solo en el modo, sino también el fondo, ya que en esta novela se desarrollarán las ideas de lealtad y honor, dos cosas que parecían alejadas de nuestra protagonista y que, sin embargo, tienen más peso que nunca.
De este modo, nos acercamos a un escenario, concepto y descripciones muy sólidas, por su correspondencia con la realidad, pero que a la vez impresionan por su magnitud, su crueldad y su crudeza. No entendamos que estamos ante una novela gore, que cabe decir que hay partes intensas en este sentido, sino ante una novela que quiere enseñar la crudeza del sistema político del consulado y de la diferencia de clases que este establecía. Una maravilla en la fantasía que nos sirve también para acercarnos a entender algo de nuestra historia antigua.
Y repito, el autor lo hace de manera magistral. No pierde un ápice del mundo ni de la esencia de Mia, pero la hace madurar en un entorno hostil, cruel y despiadado que nos involucra como lectores no solo por nuestra protagonista, sino por lo que le rodea.
Ampliación
Junto a la historia de Mia Corvere, el lector asiste a dos narraciones más.
Por un lado, tenemos la que nos ofrece las notas al pie, que en este caso creo que han sido menos, y que nos amplían el mundo a través fábulas, hechos históricos y anécdotas. Es cierto que, por lo que he ido leyendo en los grupos de lectura, esta parte sigue sin gustar porque saca de la historia. En mi caso, las disfruto mucho porque creo que el punto de comicidad, ironía y sarcasmo está ahí y me ayuda a aligerar tensión en algún caso. Continuamos con ellos, para quien os guste.
Por otro lado, tenemos la historia de los tenebrae. Podíamos pensar que en esta parte Mia se iba a interesar más por lo que es, pero es verdad que en este sentido se queda a medio gas con la investigación. No obstante, eso no implica que no sepamos más; esta línea de la historia continúa, dándonos sustos y sorpresas y creándonos, quizá, más preguntas que respuestas.
Satisfacción
La verdad es que la primera vez que comencé con el primero, me costó mucho centrarme y lo terminé abandonando, sin embargo, nunca me dejó de llamar la atención el libro. A día de hoy, me alegro mucho de haberlo empezado porque hacía mucho que un mundo no me parecía tan normal (siendo de fantasía) y que lo que me sorprende y engancha del libro es la manera de narrar.
Creo que el tono, el carácter y la crudeza con la que caracteriza el autor diálogos y personajes es el punto clave para que me guste tanto. Sería algo así como una sinceridad brutal en la creación y complicaciones del mundo, no sé cómo explicarlo mejor. Asimismo, las aproximaciones a nuestra realidad en conceptos y cuestiones políticas hacen que el lector se involucre, creando una fantasía diferente, adictiva y única.
Espero que si no habéis leído la primera parte, os animéis porque merece la pena. Si por el contrario, habéis leído el primero y no este, ya estáis tardando, ya que la historia de Mia promete y mucho. En cualquier caso, espero que lo disfrutéis, cuervos.


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