Mirar al sol es el primer libro de cuentos de la autora. Cuentos cortos, todas protagonistas mujeres con diferentes edades e historias. La autora logra describir situaciones y momentos comunes con un toque de desconcierto y perplejidad. Los siete cuentos son diferentes pero tienen un hilo en común: las mujeres y niñas de estas historias “miran al sol” e inmediatamente ven las “manchas negras residuales”. Esto, por supuesto, es metafórico pero es la sensación que ha dejado la lectura. Esos residuos, esas manchas son los detalles que sorprenden al lector/a con el desconcierto que resulta de lo demasiado normal, o lo demasiado raro, de los lugares comunes. La lectura es rápida y, aunque algunos finales me dejaron con “las manchitas en los ojos”, es decir com desconcierto, al final el libro logra en parte su misión : que dejemos de mirar al sol. |