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En esta escueta novela el protagonista (director de un programa de radio que se titula "Hola marciano") recibe en su casa la extraña visita de un hombre que dice ser un auténtico marciano. Antes de esta inesperada llegada recibe la llamada telefónica de la, se supone, mujer del marciano, advirtiéndole que éste es un enfermo mental que, aunque no es peligroso, debe tener cuidado y darle siempre la razón, tratarle bien y conversar con él porque su comportamiento puede ser imprevisible. Esta es la trama, lo inusual es el modo en el que los personajes disertan sobre cordura y locura, verdad o mentira. Con momentos totalmente desternillantes, otros más cercanos a un sesudo ensayo filosófico, Kobo Abe nos incita a dudar sobre la cordura de ambos personajes, poniendo en entredicho la racionalidad de un discurso que parece tener cada vez más dudas sobre lo que parece obvio. Si a un marciano se le ocurriese aterrizar en la Tierra todos seríamos capaces de distinguirlo de un ser humano...a no ser que fuera idéntico a éste, claro. El protagonista cree tener contra las cuerdas al supuesto marciano una y otra vez, pero una y otra vez éste con un discurso completamente razonado y lógicamente aplastante lo refuta, introduciendo en este diálogo (a veces parece de auténticos besugos) una nueva duda sobre su identidad...y la de su interlocutor. El inesperado final, en realidad es un comienzo. ¿Realmente el marciano es quién dice ser? ¿Será el ser humano capaz de reconocer a un marciano cuando lo tenga en frente? ¿Y si estuvieran conviviendo con nosotros ya y no nos hemos dado cuenta? ¿Es este mundo real, o todo es una farsa? Una obra que transita entre el absurdo, la metafísica, la topología matemática y el surrealismo, finalizando con muchas más dudas que certezas.. Una genialidad más de Abe, el autor al que califican de "kafkiano", pero que sin ninguna duda tiene personalidad propia. |
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