Me ha encantado. al igual que el primero, el tono cómico se mezcla con la una realidad tan cercana que parece que casi podemos tocarla. Me ha gustado volver a coincidir con los personajes del primer libro, sobre todo con los robots de Peter. Se trata de un mundo en el que las personas se clasifican por niveles, en el que los robots lo dominan todo, el neoliberalismo es una religión y en el que la privacidad brilla por su ausencia. Todos los miedos de la sociedad actual hechos realidad, pero contados con una naturalidad y un sarcasmo, que no puedes evitar reírte sola. Muy recomendado. |