El hombre que pudo reinar

En esta historia Kipling nos arrastra a esa india del colonialismo, donde exotismo y aventuras se mezclan.

La edición de Nórdica me ha sorprendido, no sólo por su calidad habitual, sino también por las ilustraciones que tiene, dan ritmo a la obra y merece mucho la pena el trabajo que ha dejado Fernando Vicente.

Sobre Kipling y esta obra, probablemente no sea la más sesuda, ni el máximo exponente de su narrativa. Pero de algún modo, todo lo bueno de Kipling está aquí, además aderezado por un historia de aventuras que sin ser trepidante, te deja con ganas de saber más. Sí, la extensión del libro se hace corta y parece que daría para más la historia, pero si buscas de esos relatos con los que reengachar con la literatura este es bueno y breve. Es decir de esos dos veces bueno que tanto se disfrutan.