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Para los que leyeron los dos primeros volúmenes de esta saga este libro es una gran confirmación de que nos encontramos ante una serie épica que va aumentando de interés según va avanzando la trama.El aumento de calidad de la historia es innegable en este tomo. Los personajes se nos presentan ya en mayor profundidad y empezamos a comprender muchas cosas.También hay que decir que se requiere una gran complicidad por parte del lector para aceptar la historia, a los que no sean amantes del género fantástico les va a chirriar la mezcla de elementos mágicos, de viajes en el tiempo y entre dimensiones que hace Stephen King. Quizás la parte más difícil de llevar es la que nos presenta seres inanimados que hablan, como el famoso trenecito hablador, vengativo y un poco esquizofrénico que tanta importancia va a tener en esta historia.Para los que aceptemos estas premisas, el libro es un continuo vaivén de emociones, de situaciones tensas bien resueltas y de la construcción de un imaginario que va tomando cuerpo.El libro te deja con ganas de continuar y ese quizás es lo que más miedo da, en este momento el listón está tan alto que temo que la continuación hasta el infinito de la saga acabe por matar la magia del relato.Sobre el argumento no voy a reseñar nada para no descubrir cosas que es mejor leerlas y podeis ver un resumen en cualquier reseña del libro, solo decir que el Ka-tet de Roland y sus amigos se confirma como un grupo donde el protagonismo se reparte y donde todos tienen una importancia fundamental para la historia.
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