El club de los psicópatas

Casi sin darme cuenta Katzenbach se ha convertido en uno de mis autores fijos de cada año, cuando sale su nuevo libro ahí estoy preparada para meterme de lleno en su lectura. El de este año, además, creo que lo esperaba con más ganas desde que leí la sinopsis ya que me enganchó por completo, me pareció original e interesante y afortunadamente puedo decir que ha cumplido mis expectativas.

Quizás alguien cuyo rango de autores del género sea mucho más grande que el mío dirá que no es tan raro, pero para mí este autor es diferencial en cuanto a mis lecturas. Estoy acostumbrada a thrillers donde los personajes, que pueden ser buenos, malos o regulares, no tendrán una etiqueta clara y pasarás toda la lectura intentando averiguar cuál es realmente el papel que juegan en la historia. Con Katzenbach, sin embargo, es muy habitual que sepas perfectamente quien es quien, que estén completamente identificados sean quienes sean.

En “El club de los psicópatas” conocemos a un grupo de personas, cuanto menos, variopinta. El autor nos presenta a cada uno de forma individual, permitiendo que la narración esté a cargo de todos ellos en algún momento de la historia. El club de los psicópatas es literalmente un club en la “dark web” donde se reúnen cinco asesinos, extremadamente arrogantes (lo cual creo que repercute bastante en la historia, si la leéis veréis por qué), que se creen prácticamente herederos de Jack el Destripador. Ahí hablan de sus métodos, actuaciones, se alaban unos a otros… hasta que un día, sin saber muy bien que ha camino ha seguido, aparece ahí un adolescente al que no se le ocurre otra cosa que ponerse a insultarlos y reírse de ellos. Evidentemente, se sienten tan tremendamente ofendidos que se desata la consiguiente venganza de estos cinco sobre este chico y las personas que le importan.

El ritmo de lectura ha sido casi perfecto, soy consciente de que a muchos lectores les puede parecer lento, que el autor se extiende demasiado en narraciones que podrían abreviarse, incluso yo misma puedo pensarlo a lo largo de mi lectura, pero aun así nunca me ha cansado o se me ha hecho pesado. Tengo asimilado que no es un autor de prisas, y el hecho de que a veces parezca que podría sobrar información para mí se compensa por completo por su capacidad de creación. No hay un solo personaje al que parezca que le falte algo, sea quien sea somos conscientes de su personalidad, de sus motivaciones, de su psicología (incluso las más serias y perturbadoras). La historia se va desarrollando de forma constante y lógica, nos lleva tranquilamente a cada momento álgido, nos envuelve para que no nos demos cuenta de hacía donde vamos justo antes de hacer explotar la trama ante nuestros ojos. Para mí eso lo es todo.

No puedo no recomendar este libro. Si la sinopsis resulta atrayente yo me lanzaría. Eso sí, con la idea en mente de que es una lectura para tomarla con calma. No esperéis tramas atropelladas, breves ni concisas, sino una historia muy bien construida en la que el autor no dejará nada en el aire y de la que es mejor no perderse ni un pequeño detalle.