Los senderos de la oscuridad

Una vez más, la autora nos traslada hasta Gotland, lugar en el que tendrá lugar un asesinato que desencadenará una investigación policial y, en cierta medida, también periodística. Sin embargo, no solo habrá un cadáver, a lo largo de la novela nos encontraremos con otros.

Aunque se trata de una novela de misterio y, por lo tanto, la mayor parte de la trama versa sobre la resolución de los asesinatos, también hay lugar para el amor, aunque de una forma un tanto residual.

En lo relativo a los personajes, en este libro nos encontramos con los comisarios, subcomisarios, policías y periodistas con lo que venimos compartiendo historias desde que se inició la serie Gotland. No obstante, la novela se puede leer perfectamente sin haber leído las anteriores, pues la autora hace breves referencias a los hechos pasados de estos personajes habituales en todas sus novelas. Sin lugar a duda, mis personajes favoritos son Anders Knutas y Karin Jacobson, aunque también me simpatiza Pia.

El texto está narrado en dos tiempos, por lo que en algunos capítulos viajamos hasta finales de los años noventa y principios de los dos mil. Algo a destacar en este sentido y que facilita la lectura es que estas analepsis son perfectamente localizables al estar escritas con letra cursiva. Otro rasgo a su favor es la forma de escribir de la autora, pues lo hace de una forma sencilla y que hace que el libro se lea sin apenas darte cuenta.

En definitiva, no creo que sea la mejor novela de la autora y tampoco la mejor novela de este género que he leído, pero resulta entretenida para los seguidores de la serie Gotland y, en general, para los lectores de novela negra o de misterio.