Este año estoy descubriendo libros que a primera vista (o lectura de sinopsis) parecen muy simples pero que en verdad encierran un pequeño tesoro. Lo que parecía ser una típica historia de amor de verano ha sido mucho más. ¿Se trata el amor? Sí, pero no es ni mucho menos lo más importante de esta historia y, para mi sorpresa, me gustó ese llamado triángulo amoroso (porque yo realmente no lo considero como tal, sino como una "transición"). ¿Lo mejor del libro? La relación de Jill y su padre. Estoy completamente enamorada de ellos, de su historia y de cómo la tratan, aunque no sea completamente perfecta. Trata temas tan diversos, unos de forma más directa y otros más sutiles, que de verdad me ha parecido una gran historia pero, sobre todo, una gran sorpresa. |