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La historia se centra en Jill, una joven que siempre está en busca de algo que arreglar. le encantan los autos, es por eso que trabaja en el taller mecánico de su papá. Me gustó mucho encontrarme con una protagonista que tenga intereses diferentes a las de otros libros. Sin embargo, no todo es color de rosa en la vida de Jill. Ya en el prólogo conocemos la principal problemática que atraviesa la historia y lo mucho que afecta la vida de la protagonista. De un día para otro su mamá decide irse de la casa y queda a cargo de su padre. Lo bueno es que la relación entre ellos es buena así que esto no implica un problema para ella. Lo que sí es un problema es tener que recordar cada día lo que pasó la noche previa a que su mamá los abandonara. Entre los personajes está Sean, uno de los amigos de Jill y también el chico del que está enamorada hace unos años. Aunque su relación cambió mucho en los últimos meses, ella hace un esfuerzo por tratar de recomponer las cosas y que todo vuelva a ser como antes, o al menos tener la valentía para verlo a los ojos sin sentir tristeza. En medio de su intento por dejar atrás todo el dolor y salir adelante conoce a Daniel, su nuevo vecino. Un joven que ha pasado por momentos realmente dolorosos y por el cual empieza a sentirse atraída. Sin embargo, ambos saben que no es correcto cruzar la línea de amistad. Entre el drama de tener que elegir al chico correcto también vamos conociendo algunos detalles sobre la vida de Jill y algunos personajes de su entorno que, en lo personal, me sorprendieron un montón. Con respecto al final… todavía tengo sentimientos encontrados porque mi lado fangirl hubiese preferido un cierre diferente pero si me detengo a pensar mejor las cosas, creo que es bastante acertado. Sin dudas es un libro que disfruté y que les recomiendo si buscan algo ligero, con romance y un poco de drama que los enganche hasta el final. Enlace: https://www.instagram.com/p/.. |
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