Segundo volumen de este cómic en el que Joe Hill sigue desarrollando con habilidad a sus personajes, tanto a los principales como a los secundarios, en un ejercicio literario con el que no puedo evitar compararlo con el papá King. Aún quedan en el aire los flashback (esperables, tarde o temprano) con los que se sabrá cuál fue el pasado de Rendell Locke y las causas de la tragedia que supuestamente acabó con la desaparición de sus amigos. Sigo un poco decepcionado con el dibujo, que aunque es muy eficaz, muy trabajado con decorados y storyboards, me deja un poco frío respecto a los rostros de los personajes. Sin duda, uno de los trabajos más originales e imaginativos que he leído en mucho tiempo. Un cómic muy, muy adictivo. |