InicioMis librosAñadir libros
Descubrir
LibrosAutoresLectoresCríticasCitasListasTest
>

Crítica de FranzXaverCanela


FranzXaverCanela
17 March 2024
Este libro del filipino Nick Joaquin reúne ocho relatos cortos, o cuentos, que nos trasladan a la historia de un país que se nutrió a través de dos cordones umbilicales de dos culturas madres: España y Estados Unidos. Esta es, precisamente, la metáfora que podemos adivinar, aunque el autor nos la presente muy crípticamente, en el último de los cuentos del volumen: “La mujer con dos ombligos”, que dio origen también a una novela con el mismo nombre. Hay que decir también que el tercero de los cuentos, o sea “La leyenda del calavera agonizante”, que es quizás uno de los más intensos, dio lugar también a un libro más extenso en forma de novela: “The legend of the Dying Wanton”.
El autor, que era un hombre muy creyente y en su juventud quiso ser sacerdote, nos introduce en un ambiente que bascula entre lo popular ancestral y lo hagiográfico, desarrollando sus historias con habilidad al gusto de los místicos españoles que seguro pudo leer cuando vivió en Madrid, si es que no lo había hecho antes. En este sentido, asoman quizás, en sus noches estrelladas, algunos destellos de la “Noche oscura del alma” de San Juan de la Cruz. Dice el autor en el cuento “Doña Jerónima”: “Aquella Manila del siglo XVII, ya sabía de la noche oscura del alma de la que habla San Juan de la Cruz, ya anhelaba una iluminación absoluta”. Nick Joaquin reúne mito, tradición y religiosidad para urdir estas historias profundas de su “gótico tropical” que no dejan indiferente al lector. Para este fin, el autor se sirve de la iconografía, los rituales, el santoral, la liturgia, la contricción, la penitencia, los cilicios, la salvación, la bendición, la fe, la humildad, los ritos sagrados, etc. Gran conocedor de toda esta cultura eclesial, Joaquin no duda en introducir directamente párrafos en latín, como el primer versículo del cántico de Simeón: “Nunc dimittis servum tuum, Domine”. de forma magistral el autor vincula al final del último cuento estas palabras de la Biblia que cabe recordar que originalmente fueron escritas en griego, con el anciano moribundo que regresa a Filipinas para constatar que su bello país ya está libre del yugo colonial, pronunciando así estas mismas palabras de Simeón “Ahora, Señor, puedes dejar que tu servidor muera en paz, como lo has prometido, porque mis ojos han visto la salvación”. Tampoco se puede pasar por alto la similitud que presenta el personaje de Fray Fernando en “La leyenda de la joya de la Virgen”, que corta la cabeza de la serpiente para así devolverle la joya a la madre de Dios, con San Jorge y el Dragón decapitado símbolo del paganismo.
El texto transcurre ágilmente entre alusiones constantes al colonialismo español y americano, que le dan su sello distintivo. del cuento “Solsticio de verano” destaca la detallada narración de la procesión. En el tercer cuento sobresale la aparición de la Virgen, vestida de luz solar y coronada de estrellas, ante los ojos aturdidos de Currito, el pobre calavera que da título a la narración. La estancia del autor en España queda patente en el cuento “La leyenda de la joya de la Virgen” donde llega a citar tres populares vírgenes españolas: la Virgen del Pilar de Zaragoza, la Macarena sevillana y la Virgen de Montserrat catalana brillando en su montañosa bóveda negra y cuyo aroma evoca, según el autor, todas las leyendas del grial. Efectivamente, hay voces que han situado el santo grial de Cristo en la montaña de Montserrat, dónde acudió en 1940 en busca de la preciada reliquia Heinrich Himmler, mano derecha de Hitler. Fue en vano, ya que no encontró ni rastro del grial. Por cierto que, Robert Hernando usó esta historia en su novela “Grial Montserrat”.
Comentar  Me gusta         10



Comprar este libro en papel, epub, pdf en

Amazon ESAgapeaCasa del libro
Apreciaron esta crítica ()(1)ver más