La pata de mono y otros cuentos macabros

Que un libro con una narrativa tan directa, tan ágil, y con unos diálogos tan ingeniosos y punzantes, se haya gestado entre final del XIX y primeros años del XX es toda una sorpresa.
Tal vez el único desacierto del libro no esté en el libro en sí, sino en la etiqueta que acompaña al relato que da título como uno de los mejores en toda la historia de la literatura de terror. Para mí, la pata de mono ni siquiera es el relato más disfrutable de este libro, así que entrar a este volumen con una pequeña decepción (que se trata de una buena historia, pero es que esa etiqueta te hace creer que te vas a quedar con el culo vuelto, y no es así), ya te predispone de forma negativa. Pero W.W. Jacobs te va ganando poco a poco a base de historias entretenidas, inquietantes, en las que intenta que nos demos cuenta que el verdadero terror no viene de lo sobrenatural, sino de nuestra propia ignorancia, de la tendencia del ser humano a justificar como sobrenatural cualquier suceso que no termina de entender.
La pluma del autor destila chispa, en ocasiones incluso humor muy refinado, dejando claro que es alguien que ha cultivado y se ha sentido cómodo en géneros tan dispares como la comedia.
Y es que para escribir humor hay que ser bastante inteligente, y de inteligencia parece que iba sobrado Jacobs.
En resumen, un libro más que interesante, imprescindible.