Entretenido libro ambientado en la campiña inglesa, en un agradable día de verano, enturbiado por el descubrimiento de un cadáver. A partir de este hecho, a lo largo de la historia, vamos conociendo a todos los vecinos de la zona, sus secretos (más o menos hilarantes), sus interacciones entre ellos, y, sobre todo, como reacciona cada uno de ellos ante el descubrimiento. No hay un protagonista claro, todos tienen su importancia; y, en vista de la brevedad de la obra, tampoco están desarrollados en exceso. La trama, un poco rebuscada, tiene divertidas pinceladas de humor negro. |