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Al principio estaba bastante perdida porque la transcición entre las tramas no estaba clara, sentí que aunque estaba escrito sin concierto ni orden; pero la verdad me pudo la curiosidad. Alguna que otra incongruencia. Me he perdido un par de veces. Dos historias en apariencia dispares que esperaba se cruzaran en algún momento, o defraudo. Dos protagonistas atípicas, Cynthia, una chica fresca, que sabe lo que quiere, sin pelos en la lengua; la otra, Vera, un poco inmadura, 28 años y tantos complejos y traumas que no se como se levanta cada día, aunque un dia se sacude el lastre. A medida que avanza la historia, encajaron las piezas y entendi. Los puntos de Selleck, puntos originales. A pesar de todo, me gustó. |
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