Donde la tierra se acaba

“El amor, como la música, como la pintura, como los libros, no se busca. Se encuentra. El amor es como la risa. Cuando llega, no hay quien pueda resistirse. Cuando te da el amor, como cuando te da la risa, todas las defensas se hacen pedazos” ~Donde la tierra se acaba de Luis Herrero.

David McFarlan es un escritor reconocido por haber ganado un premio Pulitzer pero que ha decidido desaparecer del mundo y esconderse en Galicia, en la “Costa da Morte”. Allí vive rodeado de amigos que saben parte de la historia de David pero no la conocen entera. La elección del lugar no ha sido aleatoria. David se refugia en el pueblo del que tanto le habló su prometida Cynthia que falleció.

Desde entonces, David ha sido el objetivo de varios periodistas que han hecho de la búsqueda del escritor su prioridad número uno. Pero el pueblo no está dispuesto a perder su paz ni a su huésped. Un día aparece medio ahogada en la arena una mujer que David recoge y da cobijo. Dice llamarse Alice pero todo indica a que miente. ¿Será una periodista más en busca de la gloria que le puede reportar escribir un artículo sobre el escritor escondido? El temor está sobre la mesa.

Es el primer libro que leo de este escritor y me ha encantado. No es un thriller que te mantenga alerta durante toda la historia ni con grandes giros. La trama se va tejiendo poco a poco pero la verdad es que es una delicia como está escrito. Me ha encantado, ¡cómo no!, el viaje que me he pegado por la “Costa da Morte”, por la mitología gallega y hasta por su gastronomía.

La historia es, en el fondo, una historia de amor. Narrada en dos tiempos: presente, en el que vivimos en la costa de Finisterre con David, y pasado, en el que conocemos la historia de Cynthia, de su familia, de cómo conoció a David y, por supuesto, de lo que sucedió para que él decidiera esconderse del mundo. Y aunque ya a partir de la mitad del libro se puede intuir con claridad lo que ha sucedido, no pierde interés en absoluto.