Esta obra de teatro es un claro ejemplo de que no hacen falta muchas páginas para disfrutar de una buena historia; en ella hay drama, romance, pasión, amor, amistad, denuncia social, justicia y revolución Sorprende la belleza de la prosa que caracteriza al autor, aún cuando lo que narra son penurias, hambre y opresión lo hace de manera sencilla, poética, simplemente espectacular, dejándonos las emociones a flor de piel Apenas 40 páginas que dan para muchas horas de reflexión, para pensar en lo que fuimos, lo que tenemos, lo derechos, las luchas obreras y para que jamás el miedo pueda controlar nuestras actuaciones, arrebatarnos los logros y sucumbir ante la opresión |