Leo el amor en libros viendo pocas similitudes con la vida, pero el amor real es mucho más interesante. En la monotonía vive y sobrevive frente a las adversidades y al más áspero trato ajeno. Se dice que se pierde más por miedo a no intentarlo, pero nuestras cabezas escudan el corazón. Yo amo, amo cada día y a cada hora, amo odiando y amo con aburrimiento, amo con parsimonia y congoja, amoncon locura y con dolor en el pecho, y amo sin sentir nada. Quiero vivir por lo que amo y lo que podría amar. Recuerdo lo que he amado con cariño y miro aquellos 'te quiero' que dije, los que pude haber dicho, y los que me dijeron sin sentirlo. No sé si amo bien, pero sé que amo de verdad y espero ser amada de la misma forma. En tiempos donde hay inmediatez y la atención es un privilegio, hay que amar sin miramientos. Me interesa todo aquello de lo que no nos atrevemos a hablar y cómo el peso de lo no-dicho acaba transformando las vidas de muchos. Me resulta fascinante lo poco que sabemos de los demás, incluso de aquellos a los que más cerca creemos tener. A veces es fácil encontrar un amor, pero no a un interlocutor. “Parejas ejemplares” guarda, con ironía, ocho historias reales, donde la perfección que se anhela brilla por su ausencia. Sentimientos honestos, impopulares, culpables y liberadores se dan cita en este libro debut de la brillante autora, Daniela Hernández Gallo. Y es que, explicar los hechos con una gran novela favorece el hecho de perdernos intentando comprender más a esos amores, pero un relato tiene que dar de lleno en el centro, y eso es un gran reto creativo. Ya lo decía Cortázar, "la novela gana por puntos y el relato tiene que ganar por knock out". Me gusta esa definición porque plantea lo importante de estas páginas: el reto de lograr lo máximo con lo mínimo y Daniela lo consigue con la aventura sensorial e introspectiva a la que nos invita con su primera obra. Gracias, Daniela, @editorialtalentura y @babelioespanol , por el viaje 🚀. #MasaCrítica |