De magos y distancias

Si me seguís desde hace tiempo, sabréis que la novela romántica me cuesta mucho. Me cuesta mucho entrar en ella, me cuesta creerme las historias y me cuesta empatizar con los personajes y sus actitudes. Cada cierto tiempo me gusta darle una nueva oportunidad al género y, si tiene algún toque distinto la historia, pues mejor que mejor.

Por eso decidí darle una oportunidad a esta historia; aparte de tener romántica, es una historia que tiene mucho más, habla de las apariencias, de la búsqueda del destino de uno mismo, de luchar por lo que quieres y no conformarse con lo que te venga y tiene realismo mágico.

He ido bastante motivada a la lectura pero, una vez más, no ha sido para mí. Ha habido partes que me han gustado mucho pero en líneas generales es una historia que me ha dejado fría. La historia de Ángela y la historia de Juan, el mago al que Ángela conoce el día antes de ir al altar, no han podido importarme menos, no he congeniado con ellos, ni sus actitudes ni sus formas de enfrentarse a las situaciones que la vida les pone por delante me han convencido. La relación entre ambos no me la he creído en ningún momento y la verdad es que, a medida que iba avanzando en la historia, me iba desinflando más ya que sentía que, para mí, no aportaba nada. Repito de nuevo, el problema es mío, si os gustan las historias románticas id a por él porque lo vais a disfrutar, tiene muy buenas opiniones pero no ha sido un libro para mí.

Reconozco el potencial que tiene el libro y eso me genera más rabia por no haberlo disfrutado y está muy bien escrito, además fue la obra ganadora del IV PREMIO DE NARRATIVA LIBROS MABLAZ.

Ya os digo, si os gusta la novela romántica lo vais a disfrutar mucho.