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Novela archiconocida de Hemingway, premiada con el Pulitzer en 1953, y por la que al año siguiente, en 1954, le otorgó el Nobel de Literatura. En menos de sesenta páginas nos cuenta una historia singular y única. Ya en el otoño de su profesión como pescador en un pueblo costero de Cuba, Santiago se alza un día a la mar. Pero esa jornada no será como otra cualquiera, él ya no es tan joven ni tiene tanta suerte. Un pez gigante y muy determinado hará que su regreso a tierra sea la gran proeza de su vida. No he leído Moby Dick, pero por alguna razón, tengo la sensación de que ambas historias las colocaría en la misma estantería, temáticamente hablando. Bueno esta es una historia sobrecogedora, diría que sobre la vejez y el paso del tiempo principalmente. También nos habla, como no, de la supervivencia, que el ingenio agudiza. Se asoma la compasión y la necesidad de la cercanía de otros. Está completamente cargada de simbolismos. En ocasiones, el mar pudiera ser la vida misma; el pez el pescador y el pescador todos al mismo tiempo. Hay que leerla como lo que es, un cuento que nos habla de los límites del ser humano, de los últimos pensamientos, quizás del destino y la soledad de vivir, porque al final, por mucho apoyo que tengamos de los demás y por muy queridos que seamos.. ¿Las batallas que enfrentamos?, esas las luchamos siempre solos. Me ha encantado |
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