Una novela romántica de época con bastantes toques de humor y situaciones que te harán reír. Me gusta que desde el principio ambos se atraen y se reconocen a ellos mismo que es así y nada más, para después poco a poco que evolucione al amor. La situación que se crea entre Hugh, Minerva, la madre de él y el resto de la familia es muy graciosa pues el protagonista tiene una gran imaginación y la madre no le importa fastidiarlo. Los personajes secundarios también son increíbles, me ha gustado sobre todo Payne, el mayordomo. La que menos me ha gustado es la menor de las hermanas de Minerva por su actitud, esperemos que cambie en los próximos libros. Un libro entretenido que te hace reír y es perfecto para desconectar. |