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Un buen thriller psicológico para el público juvenil que está saliendo de la pre-adolescencia.Debo admitir que después de haber pasado la mitad de libro había declarado que este sería un libro de dos estrellas o tres como mucho. La escritura era demasiado simple, plana y sencilla y los personajes, más allá de ser adolescentes, eran terriblemente irritantes. Pero el misterio y la atmósfera de la novela me iba atrapando más y más, tanto que había dejado de lado todos esos pormenores y clichés juveniles y me sumergí en una lectura que no perdía el hilo en ningún momento.Una vez que se desvela el misterio la historia se vuelve más oscura y retorcida. Los giros van y vienen, no te los ves venir y te das cuenta de que estás ante una buena historia... quizás abordada de un modo un tanto infantil y poco creíble de a momentos, pero aún así, la escritora se jugó bastante. Tengamos en cuenta que está dirigida a un público adolescente prematuro. Bah, o por lo menos yo lo interpreté así.Juega mucho con la magia y lo sobrenatural pero también con la psicología del personaje principal que entra en una paranoia constante, con situaciones que la llevan a perder el juicio.Como siempre, en este tipo de novelas, lo que te saca de quisio o te saca de onda es el romance tan cursi e innecesario que vuelve idiotas a los personajes. Pero una vez que aprendiste a tolerarlo -o disfrutarlo, no descarto que haya gente a quienes les guste- la historia se torna interesante.Hay poco desarrollo de los personajes y cuesta establecer una empatía con alguno u otro pero agradezco que no se me hayan antojado pesados, sino, hubiera id un bajón. La prosa, como dije antes, es sencilla pero destaco una buena caracrerización de los escenarios y paisajes.Es una historia más profunda y oscura de lo que aparenta en las primeras tres cuartas partes. Me da la sensación de que hubiera sido digna de la pluma de Gillian Flynn, a los quince años *risas grabadas* pero me encantó encontrarme con una novela con este tipo de tramas enfocadas a un público tan prematuro y narrado medianamente bien. le siguió faltando ese toque de realismo en los diálogos, pero insisto, la resolución del misterio fue genial, eso le hizo ganar muchos puntos.Ah, y... una última cosa: que alguien queme esa portada. No le hace justicia al libro.
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