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En el idílico pueblecito inglés de Lockwood hay un misterio que resolver. Todo empieza con la llegada de dos habitantes al pueblo y acaba con una trágica muerte. Aunque se ha enviado a prisión al presunto culpable, el abogado Roderick Tanner sospecha que es inocente y ordena a sus pasantes, Charlotte y Femi, que revisen todas las pruebas del caso. Y esta es la premisa de este libro que me ha volado la cabeza. Vamos a tener que ponernos en la piel de Charlotte y Femi para descubrir qué ha pasado en el pueblo, a quién han matado y quién ha sido el asesino. Lo que más me ha gustado de este libro es sin duda la manera en la que está escrito, la narración son emails, mensajes de texto, informes policiales y toda la documentación que Charlotte y Femi van a seguir para dar con el culpable. Se lee rápido, me leí las más de quinientas páginas en dos días. al principio se nos puede hacer cuesta arriba la cantidad de personajes que hay en la novela, pero enseguida reconoces quién es quién y no te pierdes, además en las primeras páginas hay una relación de personajes implicados. He leído que hay a gente que se le ha hecho largo, a mi no… tiene muchos giros y creo que tiene las páginas necesarias para que la trama quede atada y cerrada. Ni que decir tiene que va directo a una de mis mejores lecturas del año. ¿Lo has leído? |
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