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¿Puedes enamorarte de alguien sin verlo? Esta es la premisa que nos plantea esta novela con algunos clichés de aderezo como el slowburn y que los protagonistas se conocen en un hospital mientras atraviesan un episodio bastante duro. La novela me enganchó desde el principio. Son capítulos cortos, escritos en tercera persona, pero cada capítulo va alternando a los protagonistas y vamos sabiendo qué siente cada uno en las situaciones que se van dando. Conforme iba avanzando la trama aumentaban mis expectativas. Y al final se me ha desinflado. No quiero hacer spoiler, pero me han faltado escenas de ellos juntos, ahí lo dejo, pero eso hace que le baje la nota porque me ha decepcionado. Creo que hay cosas que en una novela romántica no pueden faltar (ni siquiera estoy hablando de sexo), y no entiendo por qué se han omitido. Iba muy bien, pero el final ha sido un querer y no poder. Una pena.
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