Los ríos de color púrpura

Leer un libro que no solo tiene una historia tan absorbente como formidable, pero que además sea contada de manera tan inteligente es, simplemente, una delicia.

Lo que más me ha gustado es el estilo narrativo, me ha encantado la manera de escribir de Grangé, la forma en que va trazando los hechos, la historia, es de verdad magnífico.

La historia nos narra dos investigaciones, una, la de un aparente allanamiento en una escuela y por otro lado la investigación de un brutal asesinato.

Los personajes protagonistas Niémans y Karim Abdouf son dos personajes que los han bordado, tienen tantos matices que solo el hecho de leer la manera en que el autor los ha creado ya de por sí es una verdadera delicia, por momentos me gustaba uno y por momentos el otro, al final he terminado por decidir que ambos policías son geniales en personalidad y estilo y que para mí ha sido lo mejor de este libro.

La historia, si bien resulta un poco complicada de seguir porque tiene demasiados detalles y va brincando de una investigación a otra, sin embargo me ha ayudado mucho que había visto la película hace un tiempo y eso me hizo poner en perspectiva cada cosa.

Ya que comentó lo de la pelicula, bueno, si es buena, la vi hace muchos años, pero recuerdo que lo que más me gustó fueron las actuaciones, en fin, la cuestión es que, si bien la película es buena, como casi siempre sucede, el libro ha resultado mucho, mucho mejor.

No puedo decir si el libro resulta en sorprendente o si es previsible, porque ya sabía en que acababa, pero en independencia de eso, lo que vale la pena es leer a este autor, llenarse de su enorme creatividad para crear buenos personajes y su forma de escribir, que es de verdad muy, muy buena.

Absolutamente recomendable