El trono de las siete islas

El trono de las siete islas es un libro que me llamó mucho la atención desde que la editorial, La Galera, anunció que lo iban a publicar en mi país. Tenía todos los ingredientes para que me gustara porque yo soy muy fan de las historias (culpa de Piratas del Caribe) en las que aparecen piratas, barcos, monstruos marinos, aventuras en alta mar y sirenas. Me encantan este tipo de historias y disfruto mucho leyéndolas y aventurarme entre sus páginas. Sin embargo, con esta novela no ha sido el caso. Es más, ha sido una gran decepción. Quizás, las expectativas altas que tenía sobre este libro me han jugado una mala pasada o no lo he leído en el mejor momento. No tengo ni idea de lo que ha podido pasar. No obstante, no quiero desanimaros; si os ha llamado la atención el libro y tenéis ganas de darle una oportunidad, adelante. Además, esta es solo mi opinión y que a mí no me haya gustado el libro, no significa que a vosotras/os no os vaya a gustar.

El trono de las siete islas de Adalyn Grace es una historia que parte de una premisa bastante buena y atractiva: la acción se desarrolla en un reino ficticio, Visidia, el cual está formado por siete islas y en cada una de ellas se practica un tipo de magia. Por ejemplo, en la isla de Valuka se usa la magia elemental (control sobre los cuatro elementos); o los habitantes de la isla de Suntosu utilizan la magia de restauración (curación y restauración). Además, existen la magia de encantamientos (isla Mortune), la magia de la mente (Curmana), la magia temporal (Kerost), la magia de maleficios (Zudoh) y la magia espiritual (Arida). Este último tipo (la magia espiritual) solo puede ser utilizada por algunos de los miembros de la familia real de Visidia, entre ellos, nuestra querida protagonista, Amora, y es considerada la magia más peligrosa (y poderosa) de todas. Hasta aquí todo bien. Por tanto, en los primeros capítulos de El trono de las siete islas se nos presenta todo esto y la verdad es que me ha parecido bastante interesante conocer los distintos tipos de magia que existen y la historia que hay detrás de esto (cómo intentan controlar las distintas magias, la razón por la que los habitantes del reino solo puede controlar un tipo de magia, etc.). En definitiva, creo que la ambientación del libro es bastante decente, aunque creo que la autora podría haber profundizado un poco en ciertos aspectos y detalles de esta, sobre todo, en la descripción del ambiente y de paisajes.

Entonces, ¿cuál ha sido el principal problema que he tenido con esta novela? Simple. No me ha enganchado en absoluto. Y me explico. La novela, como ya he mencionado anteriormente, partía de una premisa bastante buena e interesante con una ambientación decente; la trama tenía mucho potencial y prometía, sin embargo, bajo mi punto de vista, la autora no ha sabido desarrollar y explotar todos estos elementos que habrían hecho de esta historia algo distinto y original quedándose, así, a medio camino. ¿El resultado? Una trama sin gracia, insulsa, (y perdonad por esta expresión) en la que prácticamente, pasadas esas primeras páginas interesantes donde se nos relataba aspectos y detalles de la ambientación, no pasa absolutamente nada durante el nudo de la novela, y eso, aproximadamente, son 200 páginas (y el libro tiene 408). Además, es un trama muy lineal y sin apenas giros argumentales sorprendentes que hagan que el lector se interese y/o se enganche a la historia.

Por otra parte, los personajes (sobre todo, los protagonistas) me han parecido demasiado lineales, poco carismáticos, con poca gracia, y ninguno de ellos experimentan una evolución coherente acorde con los sucesos de la trama (o directamente no tienen evolución). Ojo, quiero aclarar que no significa que sea algo malo que aparezcan personajes planos o lineales en una historia (es más, en ciertos escritos o en ciertos aspectos de una historia es necesario este tipo de personajes), pero en historias como la que se nos cuenta en El trono de las siete islas, una novela de fantasía y de aventuras, los protagonistas deberían haber sido más realistas y complejos. Además, no he logrado conectar y empatizar con ninguno de los personajes que aparecen en esta novela (hasta el punto de que me daba igual lo que les ocurriera). Por otro lado, las relaciones que se establecen entre los personajes (hablo, sobre todo, de las relaciones amorosas) me han parecido muy forzadas y poco creíbles. Me parece bien que haya este tipo de relaciones en los libros, pero lo único que pido es que se desarrollen con total naturalidad y no sean forzadas, y, en el caso de este libro, no ha sido así.

Asimismo, aunque este argumento es, quizás, algo más "personal" que los anteriores, la forma en la que está narrado el libro (1ª persona presente desde el punto de vista de la protagonista, Amora) me ha resultado bastante confuso y me ha costado habituarme a este tipo de narrador. Posiblemente, esto se deba a que no estoy acostumbrada a este tipo de narrador (conozco muy pocos libros que estén narrados así) y lo más seguro es que sea culpa mía, pero quería apuntar a esto para justificar la nota que le voy a poner a esta novela. No obstante, y esto es un punto a favor del libro, el estilo de la autora es bastante fluido y ameno y utiliza un léxico bastante sencillo, lo que facilita mucho la lectura.

Otra cosa que me chirría bastante (aunque no tiene que ver estrictamente con el contenido del libro) tiene que ver con el hecho de que, en las citas que aparecen en la contraportada (que son frases que definen de alguna manera al libro y son escritas por otros autores o medios de comunicación), algunas de ellas no se corresponden con la realidad (o yo me he leído un libro completamente diferente). Por ejemplo, una de ellas dice lo siguiente: "Una historia de sirenas letales y aventuras marítimas llenas de peligros". Y yo me pregunto: ¿dónde está la historia de sirenas letales si, literalmente, sale una sirena en todo el libro? ¿Y las aventuras marítimas llenas de peligros? Lo siento por ser un poco hater, pero es que no entiendo porque ponen este tipo de cosas que no se corresponden con la realidad.

Concluyendo la reseña, El trono de las siete islas de Adalyn Grace, a pesar de contar con una premisa bastante interesante y atractiva y de tener una buena ambientación, ha sido una novela que me ha decepcionado en todos los sentidos: una trama muy floja y sin gracia (y muy parecida a otras historias que ya he leído) y unos personajes poco carismáticos y sin ningún tipo de evolución. Y es una lástima porque era una novela con muchísimo potencial, que contaba con una idea bastante buena e interesante, pero que la autora, en mi opinión, no ha sabido desarrollar y explotar.