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La autora de este libro me fue recomendada cuando comencé mis terapias psicológicas y cuando me atreví a leerla, quedé sorprendida, porque es una psiquitra que ha hecho una gran labor científica en estudiar como la terapia EMDR puede disminuir la intensidad emocional de los recuerdos traumáticos de una persona. Ella explica en este libro el impacto que tienen los movimientos oculares en la procesación de nuestras memorias, ya que la mayoría son imágenes almacenadas en nuestro cerebro. Pero no solo se centra en EMDR, sino que abarca distintos temas de salud mental, hace un enfoque breve de todo aquello que puede atascar a alguien en depresión y que le impide tener una vida plena. Me deja el mensaje de que "todo está conectado" y que así mismo funcionan nuestras redes de memoria, son como hilos que se entrelazan. |
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