Odio en las manos

A ver si soy capaz de controlarme y hablar de lo terrible que ha sido esta lectura desde el respeto.

Lo único que tiene de thriller este libro es un asesinato que para nada es el eje de la historia aunque pueda parecerlo. Aquí todo se reduce a darle vueltas y vueltas a las neuras de una protagonista que trabajando en la tele acaba haciéndose repentinamente cargo del gabinete psicológico de su madre.

Y no es solo que la protagonista sea vomitiva (perdonen la palabra), pero es que no hay manera de cogerla por ningún lado. Todas las páginas son una sucesión de datos irrelevantes, anécdotas de relleno y una demostración de todo lo que no debe ser un libro, especialmente de este género.

Para colmo tiene 604 páginas.

De verdad, intento no ser muy dura pero hacía tiempo que no leía algo tan…prefiero ahorrame el término.

Y aquí dejo esta breve reseña porque continuar sería incidir en una gran cantidad de elementos que hacen que esta novela no funcione para nada.

Lo peor que he leído este año sin duda.