Odio en las manos

Cuando leí la sinopsis de este título, me llamó enseguida, tenía toda la pinta de ser un thriller psicológico ya que la protagonista era psicóloga y parecía haber un caso policiaco. No tenía ni idea de quien era la autora, luego me enteré que pertenecía al mundo de los medios de comunicación.

Ana psicóloga de formación, trabaja en RRHH de una importante empresa de comunicación cuando su madre le escribe que tiene que hacerse cargo de su gabinete psicológico una temporada porque ella va a recuperarse de “algo” a la India, aun con dudas decide dejarlo todo y ponerse a ejercer como psicóloga. Su primera paciente es Rosario, una policía que le confiesa que tiene Odio en sus manos y que va a matar.

Aunque a priori ya chirría un poco eso de que de repente una novata coja las riendas de un gabinete psicológico el misterio apuntaba por varios lados.

El libro comienza bien, aunque enseguida se ve que es la primera obra de la autora ya que incluye mucha información adicional, descripciones y anécdotas que no vienen a cuento, ralentizan la historia y te sacan de la trama. La verdad es que creo que la autora solo intentaba empatizar un poco con el lector y se pasó de vueltas.

La trama del libro no está mal y al final se hila todo y excepto alguna cosa en general el desenlace es correcto. ¿Qué pasa entonces con este libro? Pues que la protagonista cae mal, así de claro lo digo, ni su pasado ni las explicaciones que se dan a su forma de ser consiguen que empatices con ella en ningún momento. Pero es que además de los secundarios tampoco se salva ninguno.

Hay además un instant love (siento el semi spoiler) que pierde aguas y alguna incongruencia sobre el funcionamiento de la terapia psicológica. Por ejemplo, la relación entre un psicólogo y la persona a la que está tratando debería ser profesional, no personal ya que si hay trato personal este puede hacer perder la objetividad y rumbo de la terapia.

Por poner puntos positivos, me ha gustado conocer como trabajan los psicólogos en los centros penitenciarios ya que es un área bastante desconocida para mi. Tampoco conocía alguno de los trastornos que aparecen en el libro.

En definitiva, a pesar de que siempre intento encontrar puntos para aprobar un libro ya que me parece una proeza conseguir publicarlo en estos tiempos, en este caso se queda por debajo del aprobado. Creo que las incongruencias tienen mucho peso.

Eso sí he de deciros que la autora escribe de una manera fácil y cercana y en mi caso no me ha costado leerlo aun teniendo tantas páginas (casi 600). Se queda en un 2,5*

Ana trabaja en el departamento de Recursos Humanos de una gran empresa. Si bien cursó estudios de psicología y además destacó en su promoción, no ejerce. Además, su apellido tiene peso propio y su madre es una profesional muy reconocida que ha trabajado muy duro hasta conseguir dirigir su gabinete junto con otra socia.

"Creo que estás preparada para asumir este encargo, que sin duda es mucho menos doloroso que los encargos a los que sueles hacer frente en ese trabajo que tanto detestas y que tan escondidas deja tus cualidades y capacidades".
María Gómez, Odio en las manos

La madre de Ana se marcha de forma inesperada. Se despide de su hija a través de un correo electrónico en el que no le da muchas explicaciones sobre el por qué de esta partida apresurada, pero sí que se entrevé en sus palabras la necesidad de alejarse para recuperarse de algún tipo de malestar emocional y este viaje a la India espera que le sirva de terapia. Pero lo que realmente perturba a Ana es que en ese correo su madre le encomienda la tarea de encargarse de sus pacientes en su ausencia. Todo un reto para ella, que desde que terminó la carrera y sus prácticas no ha desarrollado funciones relacionadas con sus estudios.

La primera paciente a la que atiende es Rosario, una agente de la Policía Nacional que no tarda en descolocar a Ana. La revelación que hace al amparo de la privacidad de la consulta, coge por sorpresa a la protagonista que, incapaz de reaccionar como hubiera querido, en ese momento no hace un análisis demasiado profesional de la situación.

"Una calma tensa inundó la consulta. Su tono agresivo-pasivo me inquietaba y esas cinco palabras contundentes seguían retumbando en las paredes, con el eco de la rabia, la ira y la desesperación. Sus ojos se habían pintado se sentencia y los míos seguían clavados en el arma que reposaba en su cadera izquierda, enfundada y anclada a un cinturón robusto".
María Gómez, Odio en las manos

Desde ese momento, Ana se debate entre mantener el secreto profesional o ir a denunciar lo que parece una seria amenaza contra la vida de alguien; ¿de la propia paciente? ¿De alguien más? Las palabras de Rosario dejan entrever que hay más de una persona en peligro, pero Ana no sabe si su poca experiencia le está jugando una mala pasada o si realmente debería dar parte de lo que le ha revelado su paciente.

La narración se mueve en varios tiempos. A medida que se desarrolla la historia principal, con Rosario y lo que a su alrededor ocurre a partir de su visita a la consulta de Ana como eje, conocemos qué llevó a la protagonista a estudiar Psicología, algunas vivencias de su infancia que marcaron sus decisiones en la edad adulta y algunos episodios a lo largo de su vida que, si bien en un principio parecen no tener gran relevancia, más tarde comprenderemos que conocer todo esto es fundamental para entender el personaje de Ana.

"No podía dejar de pensar en los motivos que llevarían a una persona educada, amable, inteligente y con una alta capacidad de seducción a convertirse en un monstruo".
María Gómez, Odio en las manos

La aparición del subinspector Miguel Ángel Gaona y la investigación que arranca a raíz de los acontecimientos que tienen lugar después de la conversación entre Ana y Rosario, confieren a la novela del carácter policíaco justo para enmarcarla dentro del género. Odio en las manos plantea un misterio en el inicio que resuelve dejando al lector satisfecho al responder a todas las preguntas. Las vivencias de la protagonista y su experiencia durante las prácticas de la carrera, denotan un gran trabajo por parte de la autora, que nos perfila el trabajo de los profesionales a cargo de la terapia psicológica en entornos realmente complejos.

No os doy más detalles de la historia porque todo lo que rodea la historia de Rosario y de la propia Ana, conforma un gran misterio que es el punto fuerte de esta novela. Y la autora ha sabido gestionar muy bien el enigma, que se desgrana poco a poco hasta llegar al final, donde se descubre toda la verdad.

Muy recomendada para los amantes de los thrillers. Especialmente para los que disfrutan de la vertiente psicológica. Porque en Odio en las manos hay mucha psicología, tanto en lo referente a las personas al límite por vivir una situación personal extrema, como por quienes se dedican a tratar a estas personas.

Impecable el trabajo de María Gómez en esta primera novela. Periodista y presentadora de televisión, cuenta con una trayectoria de más de diez años en medios nacionales como Cadena SER, RNE, LOS40, TVE, Mediaset o La Sexta. Podéis seguirla en Instagram.

Enlace: http://lacopela.blogspot.com..

🏆 Y el premio a peor lectura del año 2021 es para (redoble de tambores) “Odio en las manos”.
Me ha gustado tan poco que sé que no voy a leer nada peor este año (y espero que nunca).

Siempre digo que escribir un libro es de valientes, pero a veces la valentía no es suficiente.

Independientemente de la historia, que me pareció muy desaprovechada, no conecté en absoluto con la pluma de la autora. Siento ser tan dura, pero este libro está mal escrito y mal estructurado. Y lo peor de todo, no veo trabajo editorial por ninguna parte, es como si hubiesen publicado el bruto presentado por la autora, sin correcciones, sin arreglos, sin edición.

Si nos metemos en la historia, lo peor es la protagonista, lo de “odio” del título le viene al pelo, porque es lo que sientes por la prota desde la primera página. Es un personaje tan sumamente deleznable que le quita gracia al resto de la historia. La mitad del libro no es más que la protagonista aportando datos irrelevantes de “cultura general”, como si la autora intentase demostrar todo lo que sabe pero sin encajarlo realmente en la trama.

Una trama, por cierto, muy mal desarrollada y que, para un único misterio que tiene, se sacan de la manga una resolución que hizo que me sintiese estafada. Casi al final se puede apreciar una ligera mejoría en el ritmo de la historia, pero el viaje hasta ese punto fue tan tedioso y terrible que ya era insalvable.

Lo dicho, un merecido primer puesto entre mis peores lecturas de este año.

⚠️ Todas las valoraciones vertidas en este espacio son personales. Cada lector es un mundo con gustos propios, y se agradece respeto y tolerancia por las opiniones diferentes. Gracias.

Empezamos septiembre con una novela que he leído durante este verano y que me ha durado un suspiro. Se trata de “Odio en las manos” la primera novela de María Gómez y tengo que decir que el debut no ha podido ser más prometedor. Se nota que es periodista porque la forma de escribir, de narrar, de contar historias es maravillosa.

En “Odio en las manos” nos encontramos con nuestra protagonista, Ana García de la Serna, que trabaja en una empresa en el departamento de Recursos Humanos pero este trabajo no le llene interiormente, trabaja allí un poco por inercia ya que es psicóloga como todos en su familia. Un día su madre decide viajar a la India para desconectar y deja a Ana al frente de su gabinete y a sus pacientes para que ella se ocupe. Su primer caso es el de una mujer policía que le cuenta algo aterrador: piensa cometer un asesinato. ¿Qué harías tú en esa situación? ¿Revelarías el secreto profesional para evitar una muerte?

Como he dicho anteriormente esta novela es la opera prima de su autora y tengo que reconocer que para nada nos encontramos ante una novela de baja calidad, al contrario creo que María ha escrito una historia magnífica no solo por la trama también destacaría la calidad literaria, me ha gustado mucho su forma de escribir. Está claro que su profesión de periodista se nota en muchos detalles de la misma. Creo que es una autora a tener en cuenta y espero poder leer más novelas suyas.

Centrándonos en “Odio en las manos” diré que nos encontramos ante un thriller psicológico de esos que no dejan tregua ni margen a la improvisación, todo está bien urdido y perfectamente creado para no dejar nada al azar. Es una historia en la que además invita a la reflexión ya que trata temas actuales muy interesantes.

Nuestra protagonista se encuentra en una encrucijada y tome la decisión que tome no estará segura de hacer lo correcto. El lector conocerá en todo momento los pensamientos y sentimientos de Ana ya que la historia está narrada en primera persona por ella, todo un acierto para hacernos partícipes de todo y sufrir y sentir el mismo desasosiego que ella.

No quiero dejar de alto el arduo trabajo de documentación de la autora en cuanto a la psicología se refiere. Me ha resultado muy interesante lo relativo a enfermedades, malos tratos, violencia…un sinfín de temas que se tratan en la novela desde ese lado de la psicología donde se habla tanto de la profesión en sí como de algunas patologías pero sin ahondar mucho ni hacerlo cargado, al contrario, muy ameno y fácil de comprender para los que no somos eruditos en la materia.

En definitiva, “Odio en las manos” es una novela con una buena trama que va ganando ritmo a medida que avanza, con saltos temporales donde conocer mejor a nuestra protagonista y con un gran final. No os quepa ninguna duda de que os recomiendo esta novela.
Enlace: https://www.librospordoquier..

Conocemos a Ana García de la Serna, quien viene de una familia de psicólogos. A ella, desde muy pequeña también le ha llamado la psicología, pero para diferenciarse de su familia prefirió la rama de la psicología criminal (criminología)
Fue a sus nueve años cuando viendo una película decidió su futuro. Sin embargo, no ejerce de psicóloga ya que trabaja en el departamento de recursos humanos de una gran empresa. Pero, ¿por qué no ejerce?

Un día su madre, también psicóloga, decide tomarse un descanso e irse a la India, y le cede su puesto en el gabinete de psicología que tiene junto a la hija de una compañera y amiga. La primera paciente que ve Ana es Rosario, policía nacional, quien le dice que siente "odio en las manos". Por lo poco que Rosario cuenta a Ana, ésta interpreta que está a punto de cometer un asesinato. Es en este momento cuando a Ana le asaltan las dudas y siente que tiene un dilema. ¿Debería denunciarla o debería primar el secreto profesional?

Es a partir de aquí cuando el lector siente curiosidad por saber si realmente Rosario piensa asesinar a alguien y si es así a quién y por qué.

Es una novela que se estructura en sesenta y dos capítulos bastante cortos, lo que hace que la lectura fluya de forma rápida. Además, va dando saltos temporales en los que vemos cómo Ana desde niña toma la decisión de ser psicóloga y su pasión por dicha profesión, y por otro lado, lo que está ocurriendo en el momento actual con Rosario. Narrado todo en primera persona por Ana, por lo que sabemos lo que piensa, siente y observa. Todo ello salpicado de diálogos muy interesantes.
Una novela que comienza de una forma pausada para ir tomando un ritmo cada vez más rápido, llegando a ser vertiginoso en su final.

Un libro excelentemente documentado, en donde se ahonda en la psicología como profesión y también en las diferentes patologías psicológicas que van apareciendo. Pero aún va más allá, ya que trata temas que están a la orden del día. Víctimas que sufren, por lo que el sufrimiento y el dolor están presentes de varias formas y algo en lo que es primordial, el silencio, el silencio de las víctimas, el silencio de la familia, el silencio de amigos, vecinos, allegados, conocidos... un silencio que es cómplice del agresor o del asesino. Un silencio que Ana se plantea romper o no, aunque se deba a su trabajo y al secreto profesional.

Una novela que no sólo es un thriller psicológico, sino que plantea al lector diferentes cuestiones, lo que hace que también se reflexiones sobre lo que está leyendo.

Una novela que me ha gusta mucho, con un estilo muy particular, sencillo y de lectura ágil, excelentemente documentada, lo que la hace más interesante y que engancha al lector. Un debut muy bueno de esta escritora.
Una novela que recomiendo.
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