La única mujer viva

Llegamos a la tercera y última parte de la trilogía de zombies iniciada en "El único hombre vivo" con "La única mujer viva".

En esta ocasión siento decir que el libro no me ha gustado tanto como los anteriores. Sigue siendo un buen libro, pero no me ha enganchado como los otros y hay ciertas partes que, a pesar de estar llenas de acción, no me interesaban tanto. al ser una tercera parte no puedo ahondar demasiado en la trama, pero decir que el libro es un no parar de sucesos y que nuevamente tenemos distintos puntos de vista que nos cuentan diferentes aspectos de la historia.

Por un lado tenemos a Álex Torrent, que sigue al pie del cañón contra los zombies. Sin duda son mis partes favoritas y las que más he disfrutado. Ese sentimiento de tenerte en vilo, el miedo que sufren los protagonistas y las cosas cuestionables que se hacen por sobrevivir. En más de una ocasión dudas de la moralidad de los personajes, especialmente de Álex, pero luego piensas: ¿qué haría yo en esa situación? ¿Lo mismo o sería íntegra conmigo misma? Creo que no lo podríamos saber y por eso tampoco puedo juzgarle. Además ese tipo de acciones y moralidad gris le da mucho más jugo a los personajes.

Por otro lado seguimos con Eva Llul, quien esta vez se unirá a la agente Wright y su equipo de la MI6 SIS para seguir destapando la trama política. Aunque en el libro anterior me gustó muchísimo toda esta trama, en esta ocasión se me ha hecho más pesada. Quizás porque el gran descubrimiento se hizo en el libro anterior y esta vez era demasiado política y con muchas organizaciones involucradas.

Por último tenemos también los puntos de vista de la Delta Force, un equipo de rescate que irá a distintos puntos de la ciudad. Creo que es la trama que menos me ha gustado. La veo necesaria pero no conseguía engancharme tanto como las dos anteriores.

En resumen, "La única mujer viva" sigue la estela de sus antecesores con una trama que mezcla a la perfección el apocalipsis zombie con la corrupción política y la investigación. No obstante este libro se me ha hecho algo más pesado que los anteriores, quizás porque ya descubrimos los hechos importantes en ellos. Aún así se disfruta y es un libro tan frenético que nunca dejan de pasar cosas. Eso sí, sin duda mi favorito de la trilogía es "La noche de la avalancha".