La Vida en tus Palabras

La vida en tus palabras de Andrea.
Ante cada historia que leemos, escuchamos o vemos en la pantalla, no podemos evitar hacer paralelismos con nuestra vida, ¿Qué haría yo en esas circunstancias? Los juicios sobre el bien y el mal, las justificaciones para nuestro actuar o nuestra desidia... En fin que leyendo esta novela lo primero que me asaltó fue esa desazón ante el abuso, en este caso psicológico, lo he visto tantas veces en mis amistades, o en meros conocidos y es una de las actitudes humanas que más detesto, también me entristece mucho la orfandad de la víctima.
Más tarde la lectura me llevo por otros derroteros, el "choque cultural" del que he leído tanto y en menor medida he podido observar en primera fila, pero esta historia en particular me hizo pensar en los juicios morales que cada uno emite sobre "el otro", sobre lo que está bien o mal, según nuestros propios cánones. al decir de la autora "...mundos tan
distintos entre sí que colisionan sin más remedio..." Y el problema ni siquiera está en las diferencias sino en la falta de empatía de tratar de entender el punto de "el otro".
Nasila era una erudita en una época imposible, tuvo mucha mucha suerte, por el padre que tuvo, por el carácter que se forjó y por cómo la vida la trató.
Esta es una historia que al llegar al punto final se queda como un eco en mi mente, disfrute mucho la lectura, prendida de la historia de Nasila y Zahir, paso a paso a través de todos los paisajes que recorren. Así mismo ansiosa por saber, ya no "si", sino "como" y "cuando" se cruzarían las vidas de los protagonistas contemporáneos, los adoré a todos y a pesar de que su historia se queda en un discreto/importante 2do plano.
Andrea Golden logra un precioso equilibrios de las historias, los giros, los.personajea, los conflictos, los antagonismos, todo cerrado en torno a la novela.
Y otra cosa interesante, como lectora me sentí totalmente identificada, esa sensación de necesitar un poquito más, leer unos párrafos más, obviar las faltas de luz, el cansancio, todo por saber el destino de esos personajes que se nos antojan conocidos, amigos.