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Lo primero dar las gracias a Masa crítica y a la editorial por la oportunidad de leer este libro, la trama me llamó mucho la atención pero tengo que reconocer que luego no ha sido lo que esperaba. Os cuento un poco de que trata: Martín y Matías son gemelos, desde que eran pequeños han sido inseparables, hasta fue necesario que sus padres les llevaran a colegios diferentes porque llegó a no ser productivo que pasarán tanto tiempo juntos. Pero la vida adulta va tomando prioridad y cada uno termina siguiendo su camino, aún así continúan viéndose los domingos en casa de sus padres, y hablando por teléfono de manera asidua. A Matías le notaban raro, lo había dejado con su novia y había vuelto a casa de sus padres, su madre le decía a Martín que algo pasaba, pero Martín se escudaba en que si pasara algo lo sabría porque eran gemelos y estaban muy unidos. Sus vidas dejan de tener sentido cuando una noche, encuentran a Matías en el suelo de casa muerto, se había suicidado. Aquí comienza un largo camino de duelo, de desesperación, de dolor, de querer comprender y entender porque lo ha hecho. Martín no ceja en su empeño, y un día entra en la habitación de su hermano, allí encuentra un cuaderno donde ve como Matías se refiere a una persona misteriosa como M, y con la que queda de forma habitual. de aquí en adelante Martín necesita saber y se dedica a investigar que es lo que su hermano ocultaba. Sabía lo que podía esperarme al leer la sinopsis, pero si que es verdad que no he llegado a conectar con la historia ni con los protagonistas, y quizás mucho tiene que ver con que no abundan los diálogos y eso ha hecho que percibiera más densa y lenta la historia. |
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