Con solo una caricia

Noelia vive más o menos tranquila con su rutina. Es una mujer de pocas palabras y menos amigas que vive atormentada por Valerio, el hermano de su cuñada. La incomoda, la inoportuna y la hace sentir mal a propósito, pero el se le ha colado en el alma y le duele como un guijarro dentro del zapato.
Toma unas cuantas decisiones equívocas para tratar de apartarlo de su cabeza pero eso lo único que consigue es tenerlo aún más presente en su corazón y en su vida.
Un libro narrado desde dos puntos de vista que se lee en un momento y ese es el único defecto que le encuentro: me hubiera gustado que fuera mucho más largo para seguir leyendo más y más páginas sobre Noe y Valerio, sus malos entendidos, sus palabras nunca dichas y sus acciones contradictorias.
Una historia sobre la importancia de hablar por una misma, no dejarse llevar por dimes y diretes y aclarar las cosas cuanto antes asegurándose de que la otra persona ha captado el mensaje. Lleno de romanticismo y también algún que otro momento algo más tenso, no te lo pierdas.