La casa del azúcar

"Una joven sirvienta en una propiedad vinícola. A principios del siglo XX , entre los verdes campos de los viñedos aragoneses, se alza la noble casa de la familia Prado de Sanchís. Cuando Manuela empieza a trabajar como sirvienta, sabe que esta es su única oportunidad para escapar del destino miserable que le ha sido impuesto por su origen humilde.

Un romance secreto rodeado de intrigas familiares.

Entre los celos y los conflictos familiares -y esquivando la mirada vigilante de la señora de la casa-, Manuela se entrega a un amor prohibido que dará un vuelco a su vida y la obligará a luchar más que nunca para labrar su propio futuro.

Un secreto del pasado que podrá cambiarlo todo. Años después, cuando Manuela parece haber superado sus difíciles recuerdos de juventud, un gran secreto saldrá a la luz. Será entonces cuando ella deba desenterrar un pasado lleno de esfuerzo, amor y pasión"

Esta es una novela que me recuerda a las series británicas donde se muestra la vida de la alta nobleza o burguesía y sus sirvientes. En este caso, no es una novela ambientada en la campiña inglesa, pero sí en la aragonesa.

Aunque es una trama ya muy manida, es interesante y amena. El personaje de Manuela no te deja indiferente, ya que notas un gran cambio durante el transcurso de la trama. Comienza siendo una joven demasiado inocente para convertirse en una mujer valiente que saca adelante a su familia ante cualquier adversidad.

Realmente, la Manuela adolescente me sacaba un poco de quicio, ya que no entiendo que puede ver en Javier, hijo de Amelia, la matriarca de la familia, Javier es malcriado, caprichoso, soberbio y ante todo egoísta. Pero esta es la típica historia de amor adolescente, en la que ella piensa que él no es tan malo y que con ella va a ser diferente.

Una vez que Manuela maduró me ha parecido fuerte y decidida, pero ante todo honesta.

Aspectos positivos: trama histórica interesante, ya que trata de temas que no son excesivamente conocidos como la guerra a principios de siglo que tuvo España contra Marruecos. La autora escribe de una manera amena y sencilla, enganchando rápidamente al lector.

Aspectos negativos: La trama final me parece poco creíble, me refiero a cómo se desarrolla la vida de Manuela.

Y no hagáis mucho caso del título de la novela, ya que realmente el azúcar no tiene un papel demasiado importante...