Todo comienza con la desaparición de cinco jóvenes entre bellos parajes de una aldea de Japón y tan sólo Yumiko, una cazadora local será capaz de seguir su rastro. Ambientado en el Japón feudal del siglo XVII, en la aldea de Ottara y en distintas épocas. Y en ambas con personajes femeninos fuertes, potentes y con gran coraje. Nos encontraremos con una mezcla de géneros. Es un thriller de ficción histórica, policiaco y con una pizca de romance. Podríamos encajarlo en lo que se denomina Noir japonés. La historia es adictiva y trepidante. Los capítulos están narrados desde el punto de vista de varios protagonistas lo que hace que su lectura sea amena y original. Es una lectura muy completa. Hay mitos, leyendas y tradiciones. Clanes, samuráis y cazadores. Tiene tintes costumbristas, unas bellísimas descripciones y unos personajes muy bien creados. Tengo que destacar el gran trabajo de documentación del autor, pues hace que la ambientación sea fascinante. Hay tradiciones, amor, cultura, lealtad, aventuras y honor. Sin duda una obra maravillosa con oscuros secretos y grandes reflexiones. Con unos giros inesperados en la trama que hacen que te sientas como en una montaña rusa de emociones. |