El silencio de la ciudad blanca

A pocos días de que Tasio Ortiz de Zárate, el asesino más famoso de la historia de Vitoria a quien su gemelo Ignacio metió entre rejas, salga de la cárcel los asesinatos vuelven a sembrar el pánico en la ciudad.

El inspector Unai López de Ayala y su compañera Estíbaliz Ruiz de Gauna investigan el caso que para el primero siempre ha sido una obsesión. ¿Puede Tasio haber matado desde la cárcel? ¿Tal vez tiene un cómplice? Él mismo llama a Unai al penal para contarle que siempre se ha declarado inocente y que nunca nada tuvo que ver con los asesinatos. su nueva jefa, Alba Díaz de Salvatierra, debe responder ante sus superiores de los avances de la investigación, que no son muchos, cuando aparecen más cadáveres siguiendo la estela de los crímenes originales que pararon abruptamente al entrar Tasio en la cárcel.

La trilogía de " La ciudad blanca" arrancó con este "El silencio de la ciudad blanca" en el que al protagonista de buenas a primeras le meten un tiro y narra todo en flashbacks. Dentro de esos pasajes pasados hay otros sobre una serie de personas a principios de los años 70 en la ciudad que cobran mucha importancia según va pasando la historia y que, obviamente, están directamente relacionados con la resolución del caso.

"La ciudad blanca" es una obra entretenida, a veces da muchas vueltas para llegar a algo claro y puede pecar algo de repetitiva pero sus personajes no están mal y la historia se cierra muy bien. Ahora, sí que es cierto que tiene algunas cosas muy inverosímiles que hacen que la parte final sea más efectista que realista pero se deja leer hasta el final.

Se nota que la autora conoce muy bien los lugares que describe aunque a veces se pasa un poco con dichas descripciones, pero también nos da una clase en ocasiones de historia vitoriana.
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