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La protagonista es Eleanor de Aquitania que en su infancia sufre un episodio muy desagradable que la deja sumida en un mutismo total, cosa que la hace volverse muy observadora. Siempre le gustó estudiar y estar al tanto de todo, por lo que se convierte en una mujer muy inteligente y tenaz. Su madre muere cuando ella tiene ocho años, también muere su hermano, quedando solo ella y su hermana pequeña Aelith, junto a su padre, el duque de Aquitania. Eleanor siempre mantuvo una estrecha relación con su tío Raimond que queda rota en el momento que muere el duque y ella pasa a ser la heredera del título. Eleanor ve su mandato en peligro y no duda en trazar un plan con la finalidad de que los Aquitanios estén protegidos, además, piensa que en la muerte de su padre ha tenido algo que ver el Rey de Francia y por ello se casa con el heredero al trono, Luy, para acercarse a su enemigo y acabar con él. Pero esta trama dará muchas vueltas, ya que el día que se casa fallece el Rey de Francia en las mismas circunstancias que su padre. Por otro lado, tenemos otro personaje envuelto en el misterio durante toda la novela, que es “el niño” y cuyo destino nos sorprenderá a medida que avanza la historia. Hay otros personajes fuertes como Adamar, gran apoyo de Eleonor, Galeran un eunuco de lo más despiadado y Suger. Es un libro que en el momento que lo coges no lo puedes soltar. Consta de cuatro partes y un total de un prólogo y 64 capítulos. Narrado en primera persona por Eleonor, Luy y “el niño”. Los diálogos entre los personajes hacen que seamos testigos de todo lo que ocurre. Con una narración impoluta, nos enfrenta a un thriller histórico donde la trama va mucho más allá del simple asesinato y nos acerca de una manera detallada a una época donde las conspiraciones, conflictos, combates e incestos estaban a la orden del día y todo ello enmarcado a la perfección en la época en la que se desarrolla.
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